No podíamos irnos de Puerto Montt sin visitar Puerto Varas en la Cuenca del Lago LLanquihue.
Salimos de la Terminal de buses donde la frecuencia es cada 10 minutos, el viaje dura unos 20 minutos y el precio $ chilenos 800 es decir unos $ arg. 20.
Orgullosa de su tradición alemana heredada con el arribo de cientos de inmigrantes germanos, los poblados cercanos al lago Llanquihue preservan ese característico patrimonio, representado en la arquitectura y en la gastronomía donde las casas de tejuelas, los kuchen y la cerveza artesanal son parte de un entorno muy bello
El camino, con su bosque nativo de especies milenarias y antiguos alerces, la flora, junto a lagos y volcanes nos demostraron que éste es un lugar único de reservas naturales.
El bus nos dejó junto a la costanera y una impresionante vista se presentó ante nosotros. El Lago LLanquihue cuyo nombre fue otorgado por los pueblos originarios y que significa lugar hundido o sumergido, y los imponentes volcanes Calbuco y Osorno.
Puerto Varas es llamada tambien la "Ciudad de las Rosas" y es un lugar especial distinto a otras poblaciones chilenas. Observamos que aquí no estaban las construcciones típicas del país sino que la impronta era ciertamente extranjera, igual que los turistas que deambulaban por sus calles y barrios residenciales.
Aquí se puede disfrutar de diversos atractivos históricos y culturales además de sus playas y balnearios como playa Niklitschek que cuenta con infraestructura y camping. A pocos kilometros se encuentra el río Petrohue con sus famosos saltos y el Lago de todos los Santos con sus aguas color esmeralda y donde se practica rafting , canopuy, la pesca del salmón y el trekking en distintos destinos.
Teníamos que elegir un lugar para comer y vimos que los restaurantes tenían precios parecidos a los de Neuquén ( Caros!!!) así que optamos por un resto - bar con terraza y vista al lago que nos pareció apropiado y más discreto.
CAFE MAWE se especializaba en unos emparedados muy ricos y abundantes con la originalidad que todos tenían nombres de personas, PAO, FRANZ, ERICA fueron los elegidos y su precio oscilaba en 4000 pesos chilenos que son unos 100 pesos argentinos, las gaseosas su precio era 2.200 pesos chilenos que eran 55 pesos argentinos y una cerveza española chica sin alcohol 3.600 pesos chilenos, es decir 90 pesos argentinos.
Nos pareció raro que no expendieran alcohol y al preguntarle al mozo nos contó que no tenian el permiso correspondiente, que es difícil conseguir una patente de alcohol para un negocio tipo restaurante y que hay comunas que tardan 8, 9 meses en aprobarlo.
Caminamos, nos sentamos y observamos una ciudad limpia, armónica y con una arquitectura definida y europea/ chilena rodeada de un paisaje natural muy atrayente.
Volvimos a Puerto Montt y mañana nos esperaba un día diferente, Oliverio volvería a Neuquén y nosotros seguiríamos viaje hacia esa tierra mágica y de tradiciones que es la Provincia de Chiloé.
nais
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